domingo, 13 de enero de 2008

Y las montañas son tan altas...



Continúo sentada en un piedra. De cuando en cuando me levanto, miro el bosque, los pájaros volando, las florecitas, las nubes, el sol... pero yo me vuelvo a sentar...

Y si se puede sacar algo positivo (que siempre hay cosas hermosas, aunque en esos momentos no lo sepamos apreceiar) de estar desanimada es... la gente que estira de mi, para que no me vuelva a sentar en la piedra del camino, y que continúe escalando la montaña. Estos días para mí la montaña es el Everest. O los Apeninos.

Oteo todos vuestros mensajes, oteo vuestros blogs... y hay días que no se que decir, ni que contar, y todo lo veo tan lejos... tan relativo... tan inalcanzable....


Así que ... supongo que el gris pasará (por que ya ha pasado de negro a gris) al blanco, y del blanco a rosa, amarillo, azul y por fin a rojo... rojo pasión....

Rojo pasión por la vida, por los sueños, por las ideas, por los sentimientos, por las ilusiones, por los que nos rodean....