sábado, 4 de septiembre de 2010

DE VUELTA DE VACACIONES, Y TONTERÍAS VARIAS..






Pensaba que no pasaba mucha gente por el blog, pero a la vuelta de las vacaciones he podido comprobar que si me visitáis… Así, que empiezo septiembre con mucho ánimo blogeril.
Estas vacaciones han sido para los niños. Hemos ido a un pueblo de la costa durante el mes de agosto. Así que entre biberones de la madrugada, papillas, pipis y cacas, no he disfrutado de la playa, pero si muchísimo de mis hijos.

Y… ya trabajando, curso nuevo, nuevos retos, alumnos, compañeros, familias…

Creo que atraigo a las “señoras sabelotodo”. Nos fuimos de compras a un establecimiento de la playa, habían unos bikinis chulísimos y baratísimos. Así que, como nos miramos el euro, decidí comprar un par para el siguiente verano. Íbamos mi madre, Alex y yo. Alex dicen que se parece a mi marido o a mi padre, es decir, que a simple vista, pasa por hijo biológico.
La señora agradable-sabelotodo nos da lecciones de cómo dormirlo, cómo alimentarlo, etc. Y nosotras mantuvimos la sonrisa educada durante todo el rato. Y… salta el tema de la adopción,. No se quien lo sacó de los allí presentes (pues también estaba la dependienta), y la mujer simpática nos cuenta que tiene un primo “que le ha costado la nena china mucho dinero”. Yo le dije que la adopción es gratuita, que lo que se paga son los trámites y las traducciones, legalizaciones… Y ella me contestó que lo llamara como quisiera, pero que le había costado mucho dinero. Continúe diciéndole que la adopción nacional es totalmente gratuita y que en la internacional se pagan los trámites. Y ella continuaba contando que “encima les pidieron que tuvieran un millón de pesetas de la época, hace diez años, en el banco”. A esto le argumenté que lo que piden es una estabilidad económica y familiar…. Mira que hablábamos las dos en valenciano, pero no utilizábamos el mismo idioma. La señora se fué mirándome y pensando: ¿Y ésta boba que sabrá?”. Y yo la dejé por imposible… no entendía que los hijos no se compran.
Lo mejor: en la playa en la que nos encontrábamos habían niños adoptados de todas las nacionalidades… y de todas las etnias!!!!!!!!!!!!!!.

¡QUE ATREVIDA ES LA IGNORÁNCIA!